El Programa de Certificación de Autenticidad «La Maison Pur Sang» de Bugatti: Preservando la Excelencia Automovilística

En 2020, Bugatti, una marca sinónimo de lujo y rendimiento en la industria automovilística, lanzó su programa de certificación de autenticidad «La Maison Pur Sang» en el prestigioso Show Rétromobile de París. Este programa tiene como objetivo asegurar y preservar la autenticidad de los modelos históricos y contemporáneos de Bugatti, garantizando que su legado de más de 110 años perdure para las futuras generaciones. La primera joya automovilística en recibir esta certificación es el Bugatti Veyron 16.4 Grand Sport de 2008.

La Historia y el Propósito de «La Maison Pur Sang»
Bugatti ha sido siempre una marca icónica, no solo por sus innovaciones tecnológicas y rendimiento, sino también por su historia rica y variada. Los modelos de Bugatti son codiciados por coleccionistas debido a su historia en carreras, propietarios ilustres y sus diseños excepcionales. Hendrik Malinowski, Director de Ventas y Operaciones, subraya que preservar el estado original de estos vehículos y renovarlos con piezas originales es crucial para mantener su valor y prestigio. Este enfoque ha permitido que los modelos de Bugatti ganen premios en concursos de élite y rompan récords en subastas.
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Sin embargo, para ser aceptados en la comunidad de coleccionistas, es fundamental que los modelos de Bugatti sean auténticos y estén certificados. Esto se aplica tanto a los modelos de la era de Ettore Bugatti como a los de la era de Campogalliano y la actual era de Molsheim. Para cumplir con este estándar, Bugatti estableció el programa «La Maison Pur Sang».

Definiendo la Autenticidad
El programa «La Maison Pur Sang» opera exclusivamente en la sede de Bugatti en Molsheim, Francia. Aquí, se verifica la autenticidad de los modelos de todas las épocas de la marca. Además, el programa ofrece una gama intensiva de opciones de restauración y reconfiguración para los clientes y coleccionistas.

La filosofía detrás del nombre «Pur Sang», que significa «pura sangre», fue introducida por el fundador Ettore Bugatti para reflejar los más altos estándares técnicos, de rendimiento y estéticos de sus creaciones. Esta armonía de velocidad, elegancia, seguridad y confort ha sido una constante en todos los modelos de Bugatti a lo largo de las décadas.

El Proceso de Certificación
El primer proyecto del programa «La Maison Pur Sang» es un modelo reciente pero icónico: el primer prototipo del Veyron 16.4 Grand Sport, conocido como «Grand Sport 2.1». Este modelo debutó en 2008 en Pebble Beach, marcando un hito en la experiencia de conducción de lujo a cielo abierto. Con un impresionante acabado en pintura metálica blanco plateado y un interior en cuero color coñac, este vehículo no registrado viajó por todo el mundo, desde América del Norte y Europa hasta el Medio Oriente.

En 2020, Bugatti recuperó el Veyron 16.4 Grand Sport 2.1 y lo llevó de vuelta a Molsheim. Allí, el coche fue sometido a un proceso exhaustivo de restauración. Este proceso implicó un desmontaje completo del vehículo, confirmando su originalidad no solo mediante la inspección del Número de Identificación del Vehículo (VIN), sino también a través de la verificación de los números de identificación en componentes clave.

El equipo de «La Maison Pur Sang» en Molsheim, conocido por sus habilidades de restauración líderes en el mundo, pasó cuatro meses devolviendo el Veyron 16.4 Grand Sport 2.1 a su especificación original de 2008. Esto incluyó la preparación y repintado de los paneles de la carrocería, la renovación completa del interior con nuevo cuero y la restauración de todas las partes de aluminio. También se instaló una nueva consola central para igualar la configuración original del coche.
Impacto y Valor de la Certificación
La certificación de autenticidad de «La Maison Pur Sang» no solo proporciona una garantía de validez para los propietarios y coleccionistas, sino que también puede aumentar significativamente el valor de los hiperdeportivos exclusivos de Bugatti. Luigi Galli, quien dirige el programa en Molsheim, destacó que la confirmación oficial del estatus histórico del Veyron 16.4 Grand Sport 2.1 atrajo rápidamente la atención de numerosos coleccionistas, siendo adquirido casi de inmediato después de su restauración.
Conclusión
El programa «La Maison Pur Sang» de Bugatti es un testimonio del compromiso de la marca con la excelencia y la preservación de su legado. A través de la certificación y restauración de sus modelos más icónicos, Bugatti no solo asegura que su historia perdure, sino que también protege y realza el valor de sus vehículos para las generaciones futuras. Para más información sobre el programa, los clientes pueden contactar a su socio de Bugatti o directamente a la fábrica en Molsheim.
VALLTRO: «El Bugatti Veyron no es solo un coche, es una declaración de lo que el ser humano es capaz de lograr cuando une ingeniería, arte y ambición sin límites. Es un recordatorio de que la perfección no se alcanza por accidente, sino con obsesión, precisión y pasión absoluta por la excelencia. El Veyron no compite con otros coches… compite con la historia.»