Prueba y crítica por VALLTRO
En un mundo donde muchos deportivos parecen cortados por el mismo patrón digital, el BMW M2 CS 2025 irrumpe como un estandarte del purismo automovilístico. Lo he conducido, lo he exigido y lo he sentido: es un coupé que no busca agradar a todos, sino a quienes entienden el arte de conducir. En esta ocasión, el ejemplar que probamos vestía el color Zandvoort Blue, un azul intenso que no solo llama la atención por su carácter vibrante, sino que anticipa, visualmente, la electricidad que hay bajo su capó.
Este M2 CS, fabricado en la planta de San Luis Potosí, México, lleva tatuado en su ADN todo lo que representa la división M: precisión, poder y pasión. La ficha técnica promete, y no decepciona. El motor es un seis cilindros en línea biturbo de 3.0 litros, heredado del M3/M4 Competition, que entrega 530 caballos y 650 Nm de par, gestionados por la caja automática M Steptronic de 8 velocidades. Pero lo que impresiona no es solo el número, sino cómo entrega la potencia: lineal, rabiosa, interminable. El empuje entre las 2.500 y 7.000 rpm es tan brutal como adictivo, y el sonido que emana del sistema de escape cuádruple, con válvulas activas, es simplemente glorioso. No solo lo escuchas, lo sientes en el pecho.
La aceleración es inmediata. De 0 a 100 km/h en 3,8 segundos, sí, pero lo que realmente sorprende es cómo se mantiene plantado cuando el velocímetro sube con violencia. La dirección es comunicativa, el chasis es una obra maestra de equilibrio, y el sistema de suspensión —ajustado a un nivel casi quirúrgico— transmite todo al conductor sin sacrificar el confort. La reducción de peso de 30 kg respecto al M2 estándar, gracias al uso extensivo de fibra de carbono, se nota especialmente en curvas rápidas, donde el CS se siente más ágil, más afilado, más enfocado.
Interior con sabor a pista, pero sin perder el lujo
Dentro, el M2 CS mezcla dos mundos: la deportividad pura y el refinamiento moderno. Los asientos M en Alcántarasujetan perfectamente el cuerpo sin sacrificar comodidad, mientras que los detalles en carbono mate y el volante grueso M refuerzan la atmósfera racing. Todo está enfocado al conductor, desde la pantalla curva con el sistema operativo iDrive, hasta el menú M Setup, donde puedes personalizar motor, dirección, frenos, respuesta del acelerador y más. En el modo SPORT PLUS, todo se transforma: la transmisión se vuelve agresiva, el sonido más salvaje y el coche te pide —casi te exige— que lo lleves al límite.
¿Es perfecto?
No lo es. No es un coche práctico, y tampoco busca serlo. Su maletero es justo, el acceso trasero es limitado y el consumo, aunque controlado para lo que ofrece (9,8 l/100 km en ciclo WLTP), no lo convierte en un daily car ideal si tu trayecto diario incluye tráfico denso. Pero eso no importa, porque el M2 CS no está hecho para ir de punto A a punto B: está hecho para que disfrutes el trayecto, cada curva, cada kilómetro.
Opinión de VALLTRO: Una joya con alma de leyenda
El BMW M2 CS 2025 no solo es el M2 más potente jamás creado. Es un tributo a lo que BMW M sabe hacer mejor: crear máquinas que conectan al conductor con la carretera de forma visceral. Su producción limitada, su origen mexicano, su estética agresiva y su rendimiento brutal lo convertirán en un clásico moderno, y muy posiblemente, en un coche de culto entre los puristas. Si tienes la oportunidad —y el presupuesto— de hacerte con uno, no lo dudes. Este no es un coche que se compra por necesidad, se compra por pasión.
Precio estimado en Europa:
Desde €115.000 en Alemania. Disponibilidad bajo reserva en mercados selectos.
Color de prueba: Zandvoort Blue
Producción: Limitada – cifras aún no confirmadas
Veredicto VALLTRO:
????? – «Autenticidad M en su forma más pura. Directo al podio de los deportivos compactos más deseables del mundo.»